La Prueba Comestible de Gripe Utiliza un Sensor de Sabor para el Diagnóstico Rápido de la Neuraminidasa de la Gripe
- 8 oct
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La gripe sigue siendo una amenaza significativa para la salud global, responsable de enfermedades respiratorias agudas y de aproximadamente 500,000 muertes al año. A pesar de una reducción en las infecciones desde 2020 debido a las medidas de protección relacionadas con la pandemia, la gripe estacional continúa circulando, causando enfermedades graves. Actualmente, el diagnóstico a menudo se basa en el ensayo de reacción en cadena de la polimerasa (PCR), un método altamente sensible que, lamentablemente, consume mucho tiempo, es de alto costo y logísticamente desafiante, especialmente para las regiones de bajos ingresos. Además, la mayoría de las pruebas serológicas no logran producir resultados precisos en individuos asintomáticos.
Sin embargo, la innovación está tomando un giro sorprendentemente sabroso. Los investigadores están desarrollando un novedoso método de detección: una prueba comestible de gripe que promete un diagnóstico rápido utilizando un sensor de sabor molecular.
La ciencia involucra un sensor diseñado químicamente para detectar la presencia de la enzima del virus de la gripe, la Neuraminidasa de la Gripe. Cuando esta enzima está presente, el sensor libera un sabor, específicamente, un sabor similar al tomillo, lo que indica la presencia de la infección. El sensor en sí está compuesto por moléculas sensibles a la neuraminidasa donde un reportero de sabor (timol) está protegido hasta que la enzima viral escinde el enlace glicosídico, liberando la señal de sabor.
Este método es significativo porque está diseñado para detectar el virus antes de que aparezcan los síntomas, capturando a pacientes presintomáticos pero contagiosos. El sensor demostró ser altamente específico: las versiones modificadas del sensor respondieron selectivamente a la neuraminidasa viral (como H1N1) sin reaccionar a la neuraminidasa bacteriana. Las pruebas que utilizaron muestras de saliva de pacientes con PCR positiva detectaron con éxito la actividad de la neuraminidasa a niveles fisiológicamente relevantes en 30 minutos.
Si se valida con éxito en humanos, este enfoque podría incorporarse potencialmente en portadores simples, como chicles o pastillas, ofreciendo una alternativa de baja tecnología, accesible y de bajo costo a los hisopos nasales tradicionales y a los ensayos costosos.
Si bien la detección enzimática específica en muestras de saliva es prometedora, los investigadores enfatizan que este trabajo se basa actualmente en análisis bioquímicos en lugar de pruebas directas en humanos. Los futuros estudios clínicos son esenciales para validar que los individuos realmente puedan percibir la señal de sabor, lo cual es necesario antes de que esta emocionante prueba comestible de gripe pueda avanzar hacia el uso clínico generalizado. Este desarrollo representa un paso crucial hacia el diagnóstico de la gripe simplemente con la lengua.











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